Las molestias que ocasionan las aftas en la boca son diversas de acuerdo a la severidad del daño y su localización. Sus características clínicas definen la conducta a seguir desde el punto de vista médico, mas sin embargo hay común criterio acerca del uso y aplicación de productos naturales que pueden ser aplicados en el tratamiento de las aftas en la boca.
Si bien el origen de las aftas en la boca no está del todo establecido, hay manifestaciones comunes, como es la presencia de inflamación en la lesión que permiten identificar la aplicación de productos naturales que coadyuven a disminuir la respuesta inflamatoria y sus consecuencias; así como las deficiencias nutricionales que de conjunto con problemas relacionados con la falta de higiene bucal se convierten en los retos más trascendentes en el tratamiento de las aftas en la boca.
¿Qué productos naturales podemos aplicar para tratar las aftas en la boca?
Es de todos conocidos que el aloe vera, comúnmente reconocido como salvia, tiene valiosas propiedades como antiinflamatorio, de ahí que en este caso de las aftas bucales, donde encontramos presente un fuerte componente inflamatorio, sea aconsejable la aplicación de formulaciones que contengan extractos de aloe, las más de las veces combinado con miel que también exhibe propiedades que disminuyen la respuesta inflamatoria pero a su vez se reconocen sus marcados efectos como inhibidores de la multiplicación de bacterias.
Pero no tan solo encontramos propiedades antiinflamatorias en formulaciones de aloe. También hay otros productos naturales que muestran una alta eficacia como antiinflamatorios. Es el caso de los enjuagues de la boca con una infusión de caléndula, acción que se recomienda se efectúe tres veces al día.
Otro tanto sucede al enjuagar con la infusión que se hace con 10 ó 15 g de hojas y tallos de zarzamora o los enjuagues con agua de carabaña. En esta dirección también resulta frecuente encontrar a los que aconsejan beber una infusión de manzanilla o restregar las aftas en la boca con una bolsa de té. A propósito del uso de las infusiones, encontramos numerosos reportes del uso de lavados de boca o buches con frambuesas varias veces al día, así como el uso del romero.
Es de todos conocidos que en el arsenal de los remedios caseros de las abuelas aparece en primer lugar el uso de enjuagues con sal marina, o el uso de mostaza molida sobre la zona afectada por el afta bucal en tres ocasiones durante el día. Este remedio resulta ser altamente eficaz pero también se le conoce por sus arraigadas manifestaciones dolorosas tolerables en aras de obtener la cura de las molestas aftas en la boca. También se mezcla la sal común con 2 dientes de ajo que se machacan y se aplica por dos minutos, efectuando posteriormente, al término de media hora, el enjuague de la boca con agua corriente.
Del mismo corte, efectivo pero molesto, es el uso del limón. Su carácter ácido hace que resulte fastidioso, así y todo es frecuentemente utilizado el zumo de 2 limones que se mezclan con media taza de agua que se utilizará para hacer enjuagues de la cavidad bucal al menos tres veces al día.
Se reconoce que entre las causas generadoras de aftas en la boca está el acúmulo de toxinas que se puede mitigar ingiriendo una rebanada de papaya diaria, aprovechando el alto contenido de una enzima llamada papaína.
Como se puede apreciar contamos con un elevado número de productos naturales que podemos utilizar como valiosos recursos para eliminar o disminuir las molestias generadas por las aftas en la boca.