Los síntomas de ácido úrico alto se expresan con dolor articular, inflamación e impotencia funcional lo que se conoce como gota aguda o crónica.
Existen tres manifestaciones clínicas de los síntomas de ácido úrico alto:
- el ataque agudo de artritis,
- el periodo intercrisis y
- la gota tofácea.
La gota en particular es una enfermedad causada por el depósito de ácido úrico en forma de pequeños cristales en las articulaciones que generan una respuesta inflamatoria. Esto está determinado por existir altas concentraciones de ácido úrico en sangre, la llamada huperuricemia, depositándose el úrico en las articulaciones (tofos).
La existencia del tipo de gota que genera tofos (gota tofácea crónica) se correlaciona con las concentraciones de úrico y el tiempo de evolución de la enfermedad.
Si bien la hiperuricemia es una enfermedad metabólica frecuente al aparecer entre un 2 y un 13 % de la población adulta no es menos cierto que en muchas ocasiones se mantiene asintomática, en otros se manifiesta en el cuadro de la litiasis renal y un 1% se asocia con gota.
En estos los síntomas de ácido úrico alto se producen manifestaciones clínicas relacionadas con el depósito de cristales de urato monosódico (UMS) formando los tofos en la piel y el tejido celular subcutáneo, las articulaciones y en las regiones periarticulares. Las articulaciones más afectadas son las del dedo gordo del pie y las rodillas.
Para evitar los síntomas de ácido úrico alto o hiperuricemia
Lugar destacado ocupa la dieta si se quiere evitar y prevenir la aparición de los molestos síntomas de ácido úrico alto.
Por otro lados e debe eliminar completamente la ingestión de bebidas alcohólicas lo que modifica de forma trascendente el metabolismo hepático del ácido úrico.
Los tratamientos resultan altamente eficaces fundamentalmente aquellos que inhiben la formación del úrico, como es el caso del alopurinol.
También se ha descrito el uso de agua mineral o el agua corriente ligeramente alcalina, lo que coadyuva a excretar por la orina el ácido úrico, contribuyendo de esta forma a evitar los síntomas de ácido úrico alto.
¿Qué es el ácido úrico?
El ácido úrico es una molécula pequeña que se produce en las transformaciones metabólicas que tiene lugar dentro de la célula. Este producto final del metabolismo de las purinas, procedente de los ácidos nucleicos, debe eliminarse a través de la orina.
Las concentraciones en sangre consideradas normales son de 7 mg/dl para el hombre y de 6 mg/dl para las mujeres. Si una persona presenta valores superiores a estos referidos pueden desencadenarse diferentes síntomas que dan lugar a disímiles formas clínicas de la enfermedad al precipitar el ácido úrico en forma de cristales.
Enfermedades y condiciones que determinan el aumento del ácido úrico
Se puede encontrar hiperuricemia como consecuencia de enfermedades de origen genético.
En otros casos, el aumento está determinado por excesivas producciones de úrico como sucede en las anemias hemolíticas, algunos tipos de cáncer, enfermedades mielo y linfoproliferativas, policitemia vera, psoriasis extensas, obesidad, y también en personas que abusan del alcohol.
También encontramos aumento del ácido úrico en pacientes que padecen la enfermedad renal que determina disminución de la eliminación, como es el caso de la insuficiencia renal, riñón poliquístico, nefropatía por plomo, y también el uso prolongado de algunos fármacos.
La gota