La apolipoproteína b (apob) y el riesgo de la enfermedad del corazón

 

La apolipoproteína B es un importante componente de muchas lipoproteínas que estan involucradas en la ateroesclerosis y la enfermedad cardiovascular.

Las enfermedades ateroscleróticas y sus complicaciones son la base de un amplio número de graves enfermedades cardiovasculares.  En América latina las enfermedades cardiovasculares encabezan el listado de  causas de muertes en la población adulta, especialmente la cardiopatía isquémica.

La detección de sujetos en riesgo sin  signos y/o síntomas clínicos sería una medida preventiva eficaz para  disminuir los costos de la atención médica y mejorar la calidad de vida de los pacientes afectados. Se ha demostrado que las mediciones de algunas partículas específicas en sangre, como la apolipoproteína B, podrían servir como diagnóstico y pronóstico en este tipo de enfermedades.

¿Qué es la aterosclerosis?

La aterosclerosis es una inflamación crónica de la pared interna de las arterias, ocasionando la formación de placas o ateromas, con el consiguiente estrechamiento y dificultad para  que fluya la sangre. Si esto ocurre en las arterias que llevan sangre al corazón -las coronarias- ocasiona la angina de pecho.  Si este estrechamiento tiene su origen en las arterias que irrigan las piernas puede causar claudicación.

En caso de la ruptura de un ateroma, puede llevar a la formación de trombosis (coágulos de sangre), llegando a bloquear una arteria. De producirse esta oclusión en una arteria coronaria, puede ocasionar un infarto agudo del miocardio (ataque al corazón).(1,2)

Factores que favorecen la ateroesclerosis

Existen muchos factores que favorecen la aterosclerosis, dentro de ellos:

  • Factores hereditarios y hábitos de vida como alimentación inadecuada y sedentarismo.
  • Los niveles elevados de colesterol total en sangre parecen tener un rol muy importante en la formación de los ateromas y la enfermedad aterosclerótica subsiguiente.
  • Los niveles de las fracciones de colesterol como son LDL, VLDL, así como el aumento de ciertas lipoproteínas como la ApoB.
  • Algunas enfermedades como hipertensión arterial (H.T.A.), diabetes mellitus tipo 2, algunas enfermedades autoinmunes y otras patologías
  • Niveles elevados de triglicéridos en sangre y antecedentes de algún tipo de dislipidemia familiar.

¿Qué son las lipoproteínas y cuál es su relación con el colesterol y los triglicéridos?

Las lipoproteínas son  partículas transportadoras del colesterol y los triglicéridos a través de la sangre, puesto que estas sustancias no son solubles en la sangre por sí solas, para poder así distribuirlas en los distintos tejidos y los órganos.

Los distintos tipos de lipoproteínas están formadas por fracciones variables de colesterol, triglicéridos, fosfolípidos (un lípido con fósforo incorporado) y proteínas de distinto tipo. Estas partículas lipídicas que son transportadas por las lipoproteínas, provienen tanto de la dieta, como pueden ser producidas por el propio organismo.

Dentro de las lipoproteínas que más valor predictivo han mostrado para el riesgo de ateroesclerosis están la ApoB y la ApoA1.

Si bien la ApoA1 tendría un valor protector, pues es la principal apolipoproteína presente en el colesterol HDL (colesterol “bueno”), ya que “barre” el colesterol desde las células del cuerpo y lo lleva al hígado para su posterior eliminación.

La apolipoproteína B o ApoB

La apolipoproteína B (ApoB) es un tipo de lipoproteína que transporta colesterol y triglicéridos a través de la sangre. Es un componente muy importante encontrada en aquellas lipoproteínas consideradas con mayor poder aterogénico (productor de aterosclerosis).

Esta  partícula tienen mayor capacidad para entrar en las paredes arteriales y favorecer la llegada del colesterol a este sitio, actuando de esta manera como un elemento desencadenante de la formación de ateromas y aterosclerosis.

Valor diagnóstico y pronóstico de los valores de ApoB en plasma

La ApoB se sintetiza en 2 formas principales: la ApoB 48 y la ApoB 100. La ApoB 48 se produce en el intestino delgado. Mientras que la ApoB 100 es de síntesis hepática y tiene un importante rol en el riesgo de ateroesclerosis y enfermedad cardiovascular.

La ApoB se encuentra en todas aquellas partículas indicadas como aterogénicas, como las partículas lipoproteicas llamadas colesterol VLDL,  IDL, LDL y los quilomicrones. Por lo tanto, los niveles elevados de Apolipoproteína B se relacionan con niveles también elevados de colesterol total y de colesterol LDL.

Todas estas partículas contienen en su composición sólo una molécula de ApoB, por lo que la medición del valor de ApoB total en sangre representaría la carga global de las principales lipoproteínas asociadas al riesgo aterosclerótico.

En términos generales, el 85-90% de la ApoB estaría representando a las partículas LDL, por lo que la medición de la ApoB en plasma podría servir como un estudio con valor  predictivo en el riesgo de padecer enfermedad cardiovascular (mejor que la medición del LDL-C).

También tendría un valor pronóstico durante la instauración del tratamiento con estatinas, al evaluar la disminución de sus valores con esta medicación. Un estudio, denominado InterHeart, encontró que la relación existente entre las fracciones de ApoB/ApoA1 muestra mayor eficacia predictiva del riesgo para el ataque cardíaco que las mediciones aisladas de las ApoB o ApoA1.

Rango normal de ApoB

Los valores para la población en general:

  • El rango o valor considerado normal para la ApoB es de entre 40-125 mg/dL.

En casos de existir factores de riesgo para enfermedad aterosclerótica, los valores a considerar son más acotados:

  • Como ser  un valor deseable de menos de 100 mg/dL, para el caso de individuos en riesgo bajo o intermedio.
  • Un valor de menos de 80 mg/dL es deseable en sujetos considerados de alto riesgo, como pacientes con enfermedad cardiovascular ya presente o diabéticos.(3, 4, 5,6, 7, 8)

Cómo disminuir los valores de ApoB

Las medidas generales para disminuir los niveles de ApoB y colesterol LDL serían las mismas:

  • Reducir el consumo de grasas saturadas y colesterol
  • Aumentar la ingesta de alimentos ricos en ácidos grasos mono y poliinsaturados, así como de fibra dietaria.
  • Algunos estudios han mostrado que restringir el consumo de carbohidratos, independientemente de si el consumo de las grasas saturadas en la dieta es elevado o pobre, puede disminuir los niveles de ApoB.

Por el contrario, las concentraciones de colesterol LDL no mostraron reducción alguna con la baja en carbohidratos, lo que podría indicar que la dieta afecta a la ApoB y el LDL-C de distinta forma.

  • El ejercicio físico ha demostrado su utilidad, no sólo en la disminución de la ApoB, sino también en afectar de forma positiva la relación ApoB/ApoA1, si bien su acción sobre el LDL-C es considerablemente menor.
  • El uso de medicamentos como las estatinas.(9, 10, 11, 12).

Pues bien, contando ahora con una información más amplia sobre la aterosclerosis y la utilidad de la medición de los niveles de apolipoproteína B,  se abre un nuevo panorama sobre el valor diagnóstico más precoz y predictivo más eficaz de la enfermedad aterosclerótica y la consiguiente mejoría en la calidad de vida de estos pacientes.

[social_warfare]

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *