La controversia sobre la ingesta de frutas por parte de diabéticos tipo 2 se debe a que pese a no tener glucosa, son ricas en fructosa, el azúcar natural de las frutas.
Pese a que cualquier forma de azúcar puede elevar los niveles de glucosa sanguínea, porque son convertidas en glucosa durante el metabolismo, hay razones para no dejar de comer y beneficiarse de las propiedades de las frutas.
Uno de estos motivos es que esta fructosa está acompañada de fibras solubles e insolubles, minerales y vitaminas esenciales para una buena nutrición.
Las frutas no aumentan los niveles de azúcar sanguínea drásticamente, porque la fructosa tiene una absorción lenta a nivel intestinal y su metabolismo en el hígado también ocurre más lentamente. Por ello se considera más saludable que la glucosa, principalmente para los diabéticos.
Para una vida saludable no hace falta excluir a todas las frutas, sí controlar la glicemia y los niveles de hemoglobina glicosilada.
Lee nuestra guía sobre la diabetes: Causas, síntomas y tratamiento
¿Cómo consumir frutas?
Las frutas serán naturales porque en los jugos está más concentrada la fructosa, haciendo difícil controlar la cantidad que se pueda tomar. También se comerán en porciones controladas.
Estudios científicos sugieren que hay un equilibrio del Índice Glicémico (IG), valor que expresa la velocidad con la que los carbohidratos se transforman en glucosa sanguínea, cuando las frutas son consumidas con otros alimentos.
Este equilibrio es válido para las frutas y no para la fructosa sola, porque era habitual recomendar el añadido de este tipo de azúcar como edulcorante a los alimentos para diabéticos.
Un descontrol de la fructosa podría elevar la producción de glucosa en el organismo y, como consecuencia, aumentar los valores de glicemia sanguínea.
Lo ideal será un equilibrio entre los grupos de alimentos y las frutas ingeridas en cada comida, para mantener una alimentación regulada, un buen funcionamiento del organismo y una armonía metabólica tanto en diabéticos como en personas sin la enfermedad.
Añadir una porción de fibras, proteínas o grasas buenas a la ración de frutas, será una manera eficiente de consumirlas.
A una porción de papaya se le podría añadir una mezcla de fibras o una cucharada de avena. Si no hay fibras, será una rebanada pequeña de queso blanco o 2 nueces. Con ello la absorción de los azúcares de las frutas será más lenta y se evitarán los picos de glucosa sanguínea.
Ejemplos de frutas para diabéticos
Manzana
Se consumirá con la cáscara para ganar sus fibras, una de ellas, pectina, eficiente para controlar la glicemia y disminuir el colesterol malo.
Según estudios médicos, comer 5 o más manzanas a la semana bajará el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2 en un 23 %.
Lee nuestra guía sobre las vitaminas que posee una manzana
Aguacate
Con escaso azúcar, el aguacate es rico en grasas que aumentan el colesterol bueno y retardan el proceso de absorción de los alimentos.
Aunque genera saciedad, será consumida con precaución, sobre todo si se está con sobrepeso por ser muy calórica.
Se sabe que mujeres que comen aguacate tienen un 25 % menos riesgo de desarrollar diabetes tipo 2, que aquellas que se alimentan poco o nada con la fruta.
Lee nuestra guía sobre las 12 razones por las cuales debes comer más aguacate
Limón
Suma vitamina C, fibras solubles, es rico en ácido cítrico y es capaz de reducir el Índice Glicémico de otros alimentos.
El limón previene problemas cardiovasculares y favorece a disminuir la viscosidad de la sangre, acción fundamental pues la diabetes es acompañada de alteraciones que pueden predisponer a situaciones de trombosis en el organismo.
Lee nuestra guía sobre los 6 beneficios del limón para tu salud
Fresas
Ricas en vitamina C y potasio que ayudan a mantener la presión arterial regulada. Suman fibras que ayudan a una sensación de saciedad, manteniendo los niveles de azúcar sanguíneo bajo control.
Según un estudio médico, personas con diabetes tipo 2 que consumieron fresas con pan blanco, necesitaron menos insulina para estabilizar la glicemia sanguínea, en comparación con aquellas que solo comieron pan.
Se ha determinado que los polifenoles de las fresas pueden retardar la digestión de carbohidratos simples, lo que exige menos suministro de insulina para normalizar la glucosa sanguínea.
Las siguientes son otras frutas amables con personas con diabetes tipo II:
- Melocotón
- Durazno y peras
- Mandarina y kiwi
- Maracuyá y melón
- Papayas y guayabas
- Frambuesas y moras
- Arándanos y toronjas
Las mejores frutas para diabéticos tipo II son las bayas. Se evitarán las frutas deshidratadas por su alta concentración de carbohidratos.
Lo ideas será emprender una prueba antes de comer cualquiera de ellas o cualquier alimento, para conocer cómo reacciona el cuerpo. Para ello se monitoreará el comportamiento de la glicemia antes y después de comer con un glucómetro.
Se seguirán los siguientes pasos:
- Determinar el nivel de azúcar sanguínea antes de una comida. Tomar nota del valor.
- Calibrar el reloj para luego de dos horas a partir del primer bocado.
- Volver a medir su glicemia dos horas después.
- Evaluar las lecturas. Si los niveles de glicemia son mayores o menores a 140 mg/dL, en caso de ser afirmativo para la primera opción, consultar con el médico o nutricionista para hacer cambios en el plan de alimentación.
Comparte este artículo con tus amigos en las redes sociales, para que también conozcan cuáles frutas pueden comer los diabéticos tipo 2.
Ver También:
- Las 11 Mejores Frutas Para Diabéticos Que Saben Delicioso
- Como Los Plátanos Afectan La Diabetes Y Los Niveles De Azúcar En La Sangre
- Los Mejores 14 Alimentos Para Controlar La Diabetes Tipo II