Son muchas las posibles versiones de la receta de tarta de limón.
Siempre se puede ser creativo, y en este caso, son muchos los aspectos en los que esas variantes puede lograr que el resultado sea más o menos sabroso, con más o menos calorías.
Es un postre muy fácil de hacer, que gusta mucho y que desde el punto de vista nutricional hace un aporte de gran valor, ya que el protagonista de esta tarta, es nada menos que el limón, fruta que tiene todo tipo de beneficiosos aportes para nuestra salud y bienestar.
4 Beneficios de la tarta de limón
Antes de ver la receta, veamos un poco la importancia de tener el limón presente en nuestra dieta, de modo de sacar ventaja de sus beneficios.
1.- La tarta de limón contiene antioxidantes.
El limón aporta gran cantidad de antioxidantes, los cuales combaten los temibles radicales libres. Éstos de forman con el paso de los años, y son los que dan origen a enfermedades degenerativas, como las cardiovasculares y el cáncer.
Los radicales libres son los responsables del envejecimiento, por lo que los antioxidantes son los más naturales y efectivos agentes antienvejecimiento.
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2.- Aporta vitamina C y B
El limón tiene gran cantidad de vitamina C, lo que es clave para mantener activas nuestras defensas. También tiene vitaminas del grupo B.
3.- La tarta de limón es desintoxicante.
El limón tiene la virtud de desintoxicar nuestro organismo de algunos agentes irritantes.
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4.- Aporta minerales
El limón es una importante fuente de minerales como Hierro, Potasio, etc.
Receta baja en calorías de la tarta de limón
Para poder consumir esta tarta sin ninguna clase de remordimientos. Cuando estamos haciendo una dieta para adelgazar, siempre es bueno tener a mano algo que nos pueda saciar el apetito por algo sabroso, sin que nos lleve a arruinar el trabajo de la dieta. Por supuesto que al haber sustituido el azúcar por edulcorante, se transforma en apta para diabéticos.
Tarta de limón casera
- Para la masa de la tarta (masa quebrada)
- Una taza y media de harina
- 100 gramos de mantequilla o manteca. Se puede sustituir por margarina (y hay quienes utilizan algún queso de untar descremado. En lo personal aún no he intentado esa versión, pero parece que tiene muchos adeptos.)
- Media cucharadita de edulcorante en polvo (en especial se recomienda estevia, pero puede ser el que la persona acostumbre usar, siempre que sea apto para cocción)
- Tres yemas de huevo.
- Tres cucharadas de agua helada. Es importante tener en cuenta que el agua no debe estar apenas fría (sino que debe estar de verdad helada, por lo que es buena idea antes de comenzar con la receta colocar en el freezer o congelador por unos pocos minutos una pequeña cantidad de agua)
- Para la tarta de limón propiamente dicha
- Jugo de 5 limones medianos. Hay que tener cuidado de retirar las pepas o semillas.
- Media cucharadita de edulcorante en polvo (que sea apto para cocción. Como en la masa, en mi caso siempre uso estevia, pero depende de la costumbre de cada uno.)
- 75 gramos de almidón de maíz
- 6 yemas de huevo
- 4 claras de huevo
- 45 gramos de mantequilla
- Medio vaso de leche fría (mejor si es descremada o desnatada)
- Opcional una cuantas nueces bien picadas.
- Elaboración de la masa quebrada
- Pintamos con manteca el molde, y precalentamos el horno a 170 grados. Mezclamos la harina con la mantequilla, usando las manos bien limpias. Es importante trabajar con las manos.
- Agregamos las yemas, el agua y el edulcorante. Mezclamos muy bien y cubrimos con un papel film. En caso de no tener lo hacemos con una tela limpia. Llevamos al refrigerador por 15 minutos para que el gluten adquiera la flexibilidad necesaria. Retiramos del frio y ya la podemos estirar y colocar en el molde, dejando un alto en los laterales de al menos 2 cm.
- Llevamos al horno unos 25 minutos. Retiramos y dejamos enfriar.
- Elaboración del relleno de limón
- Mezclamos el jugo o zumo de los limones con el edulcorante apto para cocción. Llevamos al fuego, y dejamos hasta que rompe el hervor.
- Aparte vamos a mezclar la leche fría con el almidón de maíz, revolviendo muy bien. Es clave hacerlo a conciencia para evitar los grumos. Agregamos el almidón de maíz disuelto en la leche al jugo de limón que está hirviendo.
- Revolvemos con cuchara de madera cuidando que no se formen grumos. Agregamos la mantequilla, sin dejar de remover ni por un momento, agregamos las yemas, siempre removiendo con mucha atención.
- Una vez que se han integrado los ingredientes retiramos del fuego y dejamos que pierda temperatura en el mismo recipiente. Vertemos sobre la masa quebrada que ya teníamos pronta y llevamos al horno otros 15 minutos.
- Mientras tanto vamos a preparar el merengue, simplemente batiendo las claras a punto de nieve. Encendemos el horno el fuego superior o grill, colocamos el merengue sobre la tarta y dejamos que se cocine un poco
- Retiramos del fuego y agregamos las nueces picadas si nos apetece. Se puede decorar de muchas formas, las nueces son una idea, pero cada uno puede probar con lo que mas le guste. Unas simples hojas de menta dan color y quedan muy bien al paladar.
- Por supuesto que es clave dejarla perder temperatura para luego llevarla al refrigerador, donde debe permanecer, ya que se debe servir fría.
- Otras opciones.
- Se puede hacer lo mismo pero con azúcar (en cantidades adecuadas) para quienes no utilizan edulcorantes. El relleno de esta tarta es totalmente apto para celiacos pero la masa no. Lo que se puede hacer es montar este mismo relleno en una masa de tarta especial para celíacos, las cuales no son nada complicadas de preparar y en otra ocasión veremos opciones en ese sentido.
Imagen: wikipedia