Hay mejores formas de medir tu progreso que subirte a una báscula todos los días.
El peso corporal puede variar por diversos motivos, puede que tomaste mucho agua ese día, puede que retuviste muchos líquidos ese día, etc. lo que en realidad importa es cuanta grasa pierdes.
Subir diario a la balanza para verificar si adelgazamos o engordamos, puede volvernos ansiosos y perjudicar el progreso hacia nuestras metas. Lo correcto es pesarse solamente una vez cada 7 días y, mejor aún, a la misma hora.
Te explico los mejores métodos para saber si estás bajando de peso o no.
Lee nuestra guía sobre la diferencia entre bajar de peso o quemar grasa
Tu ropa es la mejor juez para saber si en realidad bajaste de peso
Uno de los mejores indicadores de que estás logrando cambios en tu cuerpo, es la manera como te queda la ropa.
Una forma de saber si estás bajando de peso, es midiéndote tus pantalones favoritos. Si los sientes holgados, perfecto, es una buena señal; si los sientes igual, sigue llevando tu régimen.
Si los sientes más apretados que antes, es una señal de alerta, que te llevará a realizar más cambios en tu rutina para perder peso.
Tómate Selfies para saber si estás bajando de peso
Para mantener tu motivación, puedes observar tus cambios a través de las fotos. Lleva, al menos cada dos semanas, un registro fotográfico de tus avances.
Aunque no te sientas confortable con tus primeras fotos, que deben ser desde todos los ángulos posibles, son importantes para veas lo que está sucediendo.
Si comparas una imagen actual con las primeras y observas cambios favorables, puedes sentirte orgulloso y saber que vas por el camino correcto.
Te sientes con más energía
Antes de comenzar tu dieta para perder peso, despertarte temprano para hacer ejercicio era una tarea titánica, ahora sales de la cama más rápido, lo cual es buena señal de que tu cuerpo tiene mayor energía.
Una buena razón para sentirte postivo, respecto a tus avances, es cuando sientes que, a pesar de que tuviste un día muy pesado, llegas a casa y todavía tienes energía y no necesitas refugiarte en el sofá.
También observarás cambios como:
- Ir al baño de una manera regular.
- Tu piel se ve y se siente mejor.
- Disminuyen tus deseos de comer.
En lugar de pesarte todos los días, enfócate en romper récords en el gym
Una excelente forma de realizar esta tarea es concentrarte en situaciones donde puedas tomar el control.
Por ejemplo, si esta semana corriste un kilómetro, intenta batir ese récord la próxima semana. Si fuiste al gimnasio a hacer 1 hora de ejercicio, haz media hora más la próxima vez y así sucesivamente con diferentes situaciones de tu nueva rutina.
Haz más ejercicio cada semana
El tipo de ejercicio físico no es lo más sustancial, ya que puedes aprovechar todas las oportunidades para gastar calorías que se te presenten.
Puedes hacer ejercicio tres veces a la semana, por ejemplo, abdominales hipopresivos, que sirven para disminuir y fortalecer el abdomen, invirtiendo poco tiempo.
Además de eso, hay algunas actividades diarias que te pueden ayudar enormemente:
- Utiliza las escaleras en vez del elevador.
- Bájate una parada de autobús anterior a la que normalmente te bajabas.
- Sal a dar una caminata de mínimo 10 minutos, después del almuerzo.
- Saca a tu perrito a pasear en la tarde o noche.
Para incrementar la quema de energía, haz recorridos de por lo menos 45 minutos, al menos tres días a la semana, ya que está comprobado que caminar es uno de los mejores ejercicios para perder peso.
También puedes realizar entrenamiento de resistencia y musculatura para perfeccionar tu preparación física.
Lee también nuestra guía sobre las 11 actividades para iniciar bien tu día
Date Algunas Recompensas
Si antes celebrabas cualquier logro comiéndote un dulce, ahora podrás recompensarte haciendo una actividad que te gusta como ir a una buena obra de teatro, bailar, comprarte un par de zapatos o mejorar tu plan de ejercicios.
Revisa Tus Patrones De Sueño
Cuando tus necesidades físicas en general estén satisfechas, notarás que puedes dormir profundamente entre 7 y 9 horas cada noche, lo cual es un buen indicador de que estás haciendo bien las cosas.
Equilibrio Físico Y Emocional
Estás haciendo lo correcto cuando puedes disfrutar una cena copiosa o dejar de hacer tu rutina de ejercicios por un día y no sentir culpa.
Eso prueba que puedes entender que la vida no es tan rígida y que luego podrás retomar tu rutina saludable sin problemas.
Y, en este punto, que estás logrando avances significativos en lo físico y lo mental, solo te queda: ¡seguir adelante!
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