El término maníaco-depresivo describe los dos polos o extremos de los estados de ánimo que experimentan quienes padecen psicosis maníaco-depresiva, o sea, la manía como un estado exacerbado de euforia, y la depresión como un periodo de profunda languidez emocional.
La psicosis es la incapacidad de reconocer lo que es real y lo que no en el mundo que te rodea.
No todos los trastornos bipolares vienen acompañados de psicosis, pero cuando una persona es psicótica, sus percepciones y sus pensamientos no se corresponden con la realidad. Las personas psicóticas frecuentemente padecen alucinaciones o delirios.
Muchas personas asocian la psicosis con la esquizofrenia, pero la realidad es que puede ser un síntoma de otras condiciones mentales y físicas. Las personas con trastorno bipolar grave, pueden llegar a experimentar alucinaciones o delirios.
Cuando esto ocurre, se diagnostica trastorno bipolar con episodios psicóticos, ya sean de tipo maníaco, depresivo o mixtos. Algunos médicos se refieren a esto simplemente como psicosis bipolar.
Síntomas de la psicosis bipolar
Los episodios psicóticos pueden aparecer durante las fases maníacas o depresivas del trastorno bipolar, sin embargo, es más común que aparezcan durante las fases maníacas.
La psicosis no es una ruptura espontánea y severa con la realidad, sino que va desarrollándose gradualmente, con síntomas iniciales que muchas veces pueden pasar inadvertidos o confundirse con simples extravagancias.
Entre los síntomas tempranos de la psicosis podemos encontrar:
- Ansiedad.
- Disminución en la expresión emocional.
- Sospechas frecuentes hacia los demás.
- Disminución en el contacto social.
- Dificultad para concentrarse.
- Dificultad para expresarse claramente.
- Descuido en la higiene personal.
- Disminución del rendimiento en el trabajo o la escuela.
Cuando la condición avanza en el marco de un desorden bipolar, también pueden aparecer:
- Pensamientos y habla irracional o incoherente.
- Delirios.
- Alucinaciones.
- Pérdida de la conciencia.
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Pensamientos o habla irracional o incoherente
Las personas psicóticas con frecuencia tienen pensamientos irracionales. Normalmente, la gente a su alrededor comete el error de intentar racionalizar con estas personas, sin embargo, estas son incapaces de entender la realidad.
Su discurso puede ser demasiado rápido y difícil de entender, ya que saltan de un tema a otro sin aparente conexión lógica.
Delirios
Los delirios son creencias inamovibles acerca de cosas que no son reales o que son francamente muy poco probables.
Los delirios pueden tomar muchas formas, como el delirio de persecución, en el cual una persona está segura de que otras, o incluso grandes corporaciones internacionales, le espían y le persiguen.
Otro tipo de delirios son los de grandeza, en los cuales una persona comienza a creer que tiene atributos especiales o poderes de alguna clase, como que es invencible o inmortal. Es común que los delirios de grandeza aparezcan durante las fases maníacas del trastorno bipolar.
Alucinaciones
Una alucinación se define como la percepción de algo que no existe, como si fuera real. Las personas que padecen alucinaciones pueden llegar a ver cosas que no están ahí, a escuchar voces o a tener sensaciones físicas incomprensibles.
Las alucinaciones pueden afectar a cualquiera de los sentidos y tomar muchas formas diferentes.
Pérdida de conciencia
Algunas veces durante un episodio psicótico, quien lo parece realmente no está consciente de su conducta, sobretodo cuando no es capaz de darse cuenta de que sus delirios o sus alucinaciones no son reales.
Ya sea que aparezca una pérdida de la memoria que abarca el episodio psicótico, o que la persona llegue a dañar a otros, por ejemplo sus familiares, con un convencimiento genuino de que se trata de atacantes.
Una persona con un episodio psicótico puede incluso llegar a atacar a sus hijos motivada por pensamientos irracionales como que no se trata de sus hijos, sino de robots espías infiltrados por el gobierno, por ejemplo.
Tipos de psicosis en el trastorno bipolar
Los síntomas psicóticos en las personas con trastornos bipolares se dividen en congruentes e incongruentes con el estado de ánimo. Algunas veces ambos tipos de síntomas aparecen al mismo tiempo.
Síntomas de psicosis congruentes con el estado de ánimo
Se trata de delirios o alucinaciones que derivan directamente de la forma en que la persona se siente, ya sea que se encuentra en una fase depresiva o maníaca de su enfermedad.
Por ejemplo, una persona que tenga sentimientos depresivos de culpa o hipocondría puede tener alucinaciones de muerte o enfermedad. Un paciente que se encuentra en un estado maníaco, puede presentar delirios de grandeza.
Síntomas de psicosis no congruentes con el estado de ánimo
Se trata de los síntomas que no se relacionan directamente con la fase maníaca o depresiva del paciente.
Este tipo de alucinaciones o delirios pueden tomar la forma de una sensación auditiva en la que creemos escuchar los pensamientos de los demás o los propios, o del convencimiento de que todos estamos siendo controlados por extraterrestres.
Se considera que los síntomas psicóticos que no tienen que ver con el estado de ánimo o las creencias de las personas, se presentan cuando el cuadro es más grave.
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Causas de los síntomas psicóticos en la bipolaridad
Así como el trastorno bipolar, la psicosis bipolar es una condición que aún no se comprende en su totalidad. En realidad, esto es cierto con la gran mayoría de los desórdenes mentales.
Hasta el momento, lo más certero que podemos decir es que puede tratarse de una combinación de factores genéticos en la química o estructura cerebral.
¿Cómo se diagnostica el desorden bipolar?
El trastorno bipolar es una de las enfermedades mentales más complicadas de diagnosticar correctamente.
Cuando aparece un cuadro típico con síntomas de psicosis, se vuelve un poco más fácil, además de que mientras más temprano sea el tratamiento, mejor es el pronóstico. Pero muchos cuadros de trastorno bipolar con psicosis son bastante particulares y atípicos.
Tratamiento de los síntomas psicóticos en la bipolaridad
La manera más efectiva de tratar la psicosis es el tratamiento integral. Esto significa que se necesitan cambios en el estilo de vida, así como medicación y terapia. En algunos casos graves, aún se prescribe la terapia electroconvulsiva.
Entre los tratamientos más frecuentes de la psicosis encontramos:
- Medicamentos antipsicóticos o antidepresivos: tienen la función de estabilizar el estado de ánimo. Este tipo de medicamentos sólo puede prescribirlos un médico.
- Terapia psicológica: Su objetivo es que el paciente desarrolle habilidades que le permitan autorregular su estado de ánimo y su conducta. La psicoterapia puede ser individual o grupal.
- Terapia electroconvulsiva: Cuando la medicación y la terapia no dan los resultados esperados, se puede recurrir a una serie de choques eléctricos controlados en el cerebro del paciente. Aunque no queda muy claro cuál es el mecanismo específico de acción de las descargas, éstas parecen tener la capacidad de “reiniciar” el cerebro, lo cual causa una rápida mejoría en muchas personas.
No todas las personas que experimentan un episodio psicótico tienen un trastorno mental permanente. Muchas veces, algunas circunstancias extremas pueden llevar a las personas a perder el contacto con la realidad, sin embargo, en estos casos el pronóstico es mucho más optimista.
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