La gripe y los resfriados son uno de esos males que no podemos evitar.
Todas las personas los hemos padecido alguna vez, y aunque algunas son más propensas que otras enfermarse, la realidad es que hay ciertas épocas, sobretodo en invierno, en las cuales es casi imposible escaparse de tener por lo menos un resfriado ligero.
Aunque la gripe y los resfriados no son enfermedades graves, la mayor parte de las veces sí pueden ser muy molestas. Sus síntomas más frecuentes incluyen:
- Fiebre.
- Dolor en el cuerpo y en las articulaciones.
- Dolor de cabeza.
- Congestión nasal.
- Dolor de garganta.
- Tos.
- Resequedad en las vías respiratorias.
Cuando estos síntomas atacan, pueden llegar a durar desde un par de días hasta semanas, y definitivamente merman nuestra calidad de vida y nuestra productividad en el trabajo, la escuela o cualquier actividad.
Afortunadamente, existen varios remedios naturales para no sentirnos tan mal durante esta enfermedad.
Remedios naturales para la gripe y los resfriados
Antes de continuar con nuestro listado de remedios naturales, es importante que recordemos que siempre debes ir a visitar a tu médico en cuanto aparecen los síntomas de una enfermedad, ya que sólo él puede distinguir si se trata de una gripe sin importancia o de algo más grave.
Lo que sí es real, es que los remedios naturales pueden ayudarte a sentirte mejor sin la necesidad de consumir tantos medicamentos.
1. Beber mucha agua
Cuando estamos enfermos, nuestro cuerpo está atravesando por una infección de virus o bacterias, y una de las maneras en las cuales se deshace de estos patógenos es a través de la expulsión en los fluidos.
Por esa razón, nuestra nariz comienza a producir grandes cantidades de mucosidad.
Durante un resfriado o un episodio de gripe necesitas beber más líquidos que de costumbre, porque los estas perdiendo más rápido.
Cuando nos mantenemos hidratados, nos sentimos mejor y le ayudamos a nuestro organismo a sanar con más rapidez.
Lee nuestra guía sobre el agua destilada: ¿Qué es y si debes tomarla?
2. Ajo crudo
Uno de los remedios más potentes de la naturaleza también es uno de los más fáciles de conseguir.
Está comprobado qué el ajo es excelente para el sistema inmunológico y que tiene grandes propiedades curativas para el cuerpo. Además, el ajo es un alimento muy económico que puedes encontrar casi en cualquier lado.
La manera más efectiva de consumirlo para que nos ayude a sentirnos mejor cuando estamos enfermos, es crudo. Puede molerse con un poco de agua y miel, y aunque su sabor puede ser bastante fuerte, sus beneficios superan por mucho está pequeña desventaja.
3. Vapor
Uno de los síntomas más comunes de la gripe y de los resfriados, es esa molesta sensación de extrema resequedad en la nariz, garganta y en general en las vías respiratorias.
Quizá hayas notado que cuando estás enfermo y te das un buen baño caliente, te sientes mejor de inmediato. Esto se debe a que el vapor del baño está ayudando a humectar tus vías respiratorias.
Para elevar la humedad de una habitación puedes conseguir un humidificador, que los venden en casi cualquier farmacia y centros comerciales. Pero también puedes hacer un humidificador casero simplemente hirviendo un poco de agua y acercándote a respirar el vapor con cuidado de no quemarte.
Si te cubres la cabeza con una toalla para evitar que el vapor escape y agregas algunas gotas de un aceite esencial como eucalipto o menta, los resultados serán mucho mejores y duraderos.
Luego de diez o quince minutos respirando el vapor, nuestra nariz estará menos congestionada y nuestra garganta menos adolorida.
4. Té de hierbas
Existen muchas hierbas naturales con las que puedes hacer un té que te ayudará a sentirte mejor durante tu enfermedad. Entre ellas se encuentran la manzanilla, la yerbabuena, la menta, la canela y la lavanda.
Muchas de sus propiedades te ayudarán a desintoxicar el cuerpo y también a consumir líquidos con más facilidad.
5. Caldos y sopas
Los líquidos calientes son fabulosos para la gripe y el resfriado porque nos ayudan a hidratarnos, a entrar en calor y a disminuir el dolor de la garganta.
Los caldos y las sopas son uno de los remedios más populares para cuando nos sentimos mal, pues además de ser fáciles de digerir para el cuerpo y estar cargados de nutrientes, parecen tener una extraña cualidad que nos hace sentir mejor anímicamente.
6. Jugo de limón y jengibre
El jugo de limón está cargado de vitamina C, y el jengibre tiene grandes propiedades antisépticas y antiinflamatorias.
Puedes simplemente meter a la licuadora un trozo de raíz de jengibre con jugo de limón y una cucharada de miel y tomártelo como si fuera jarabe, pero también puedes hacer un rico té calientito con todos estos ingredientes.
Lee nuestra guía sobre los beneficios del limón
7. Electrolitos
Cuando estamos enfermos, aunque nos sentimos mal no tendemos a tener demasiada sed, por lo cual puede ser difícil consumir tantos líquidos como los requerimos.
Una buena solución es conseguir bebidas hidratantes con electrolitos, pero también puedes hacerlas en casa mezclando agua mineral con jugo de limón o naranja y una pizca de sal.
8. Vinagre de manzana
Ciertamente no es uno de los remedios más populares debido a su fuerte sabor, pero sí es uno de los más efectivos para calmar una garganta adolorida.
Puedes tomar una cucharada directamente, o, si no soportas el sabor, diluirla en un poco de agua caliente con miel.
Lee nuestra guía sobre cómo hacer vinagre de manzana
9. Bayas de saúco
Las bayas de saúco son un gran remedio natural que se ha utilizado durante cientos de años para tratar varias enfermedades y sus síntomas.
Las bayas de saúco secas sirven para hacer infusiones y remedios muy efectivos contra la gripe y el resfriado.
10. Vitamina C
No es ningún secreto que la vitamina C realmente puede ayudarnos a deshacernos mucho más rápido de la gripe y el resfriado.
Puedes conseguir suplementos de vitamina C, pero también puedes aumentar tu consumo de cítricos para conseguir una saturación en la sangre que le ayude a tu sistema inmunológico a combatir a la enfermedad con más efectividad.
11. Manzanilla
La manzanilla tiene muchas propiedades. Además de tener un sabor muy agradable y ayudarnos a conciliar el sueño, un té de manzanilla puede combatir varios de los síntomas más frecuentes de la gripe y el resfriado con la misma efectividad qué una pastilla para los síntomas de esta enfermedad.
12. Menta
La menta se utiliza con frecuencia para tratar algunos trastornos digestivos, pero también puede ser efectiva para aliviar la fiebre, además tiene propiedades antibacterianas y antivirales y su sabor es muy agradable.
13. Aceite de eucalipto
El aceite de eucalipto tiene excelentes propiedades expectorantes, lo que significa que ayuda a descongestionar las vías respiratorias.
Puedes usar unas gotas de este aceite en el humidificador o frotarlas directamente en el pecho y espalda dando ligero masaje.
14. Duerme suficiente
¿Te has preguntado por qué el cansancio es uno de los síntomas más comunes de la gripa?
Pues porque tu cuerpo está usando mucha de su energía en combatir al patógeno. Dormir es una gran manera de permitirle recobrar fuerzas y eliminar más rápido a la enfermedad.
Cuando estés resfriado, simplemente procura dormir todo lo que tu cuerpo te pida.
15. Evita los entornos secos
Cuando estamos enfermos, nuestras vías respiratorias tienden a resecarse. El problema empeora si te expones a condiciones ambientales secas.
El exterior y los interiores con aire acondicionado son entornos sin suficiente humedad, por lo cual deberías evitarlos. Ayúdate con un humidificador para mantener tu habitación con una buena saturación de humedad.
16. Cubre tus pies y tu cabeza
Nuestras abuelas nos decían con frecuencia que no es bueno andar descalzos, y mucho menos cuando estamos enfermos, y en parte tenían razón.
Los cambios bruscos de temperatura empeoran los síntomas del resfriado, y es fácil perder gran cantidad de calor a través de los pies y la cabeza. Unos calcetines gruesos y un gorro pueden ser grandes aliados para que te sientas mejor.
17. Distráete
Para algunas personas tener un episodio de gripe es horrible, pero también es la oportunidad para quedarse en casa haciendo cosas agradables y tranquilas, como armar un rompecabezas, ver un maratón de series o jugar juegos de mesa.
Eso sí, procura mantenerte alejado de la cocina, pues puedes contaminar los alimentos que prepares, y mantén tu entorno lo más limpio posible para evitar contagiar a alguien más.
A nadie le gusta resfriarse, pero tampoco es como que podamos evitarlo del todo.
Si estás enfermo, lo mejor que puedes hacer es tomarlo con filosofía, beber muchos líquidos, tener a la mano varios de los remedios que acabamos de mostrarte y consentir a tu cuerpo todo lo posible.
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